Tengo miedo, miedo a que sea solo mio.

La belleza no está en un donde, tampoco en un cuando, incluso se puede decir que no esta en quien, ni en un por qué.
Esta en todo eso, si, no lo voy a negar, pero hay algo más.
Una mezcla.
Una situación.
Un paseo por las estrellas, por nuestras estrellas.
Y echar a correr, para ver quien llega antes a un banco ,desgastado ,al final de un precioso jardín de estrellas del cual nadie se percata. Solo por que un estúpido banco  concentra la atención de los espectadores.
Quizá solo sea un lugar más.
Pero es lo único que me queda, una de las pocas cosas a las que puedo aferrarme.
Un lugar donde las palabras se han quedado escondidas detrás de los rosales (A sabiendas de que las más hermosas rosas tienen grandes espinas) para ver si volvemos.
No he vuelto a ver estrellas.
Ni a contemplar rosales desde un banco.
Por que tengo miedo de que pase a ser solo mio en vez de nuestro.
Y eso,eso es una gran catástrofe.